Xàbia sigue achicando agua en el Saladar
http://www.diarioinformacion.com/secciones/noticia.jsp?pRef=2206_17_684093__MARINA-ALTA-solar-junto-para-viviendas-damnificados
E l agua que se achicaba todavía ayer en el Arenal de Xàbia dejaba su huella en la playa. Un espectacular
chorro caía sobre la arena y la arrastraba hasta el punto de dejar al descubierto la piedra tosca y la base de los lavapiés. Las bombas aún funcionaban a pleno rendimiento y evacuaban agua del Camí dels Tamarits, que continúa inundado, y del propio Saladar. En este último achique, el agua se evacuaba a la Sèquia de la Nòria, que es un canal de época romana excavado en la tosca. Desde este antiguo canal, el agua sale al litoral del Muntanyar y al mar.
Quién iba a pensar que, tras siglos, la Sèquia de la Nòria de nuevo vería correr el agua. Si en época romana se utilizaba para introducir agua marina y fabricar la sal del garum (salazones), ahora este canal sirve para tratar de bajar algo el nivel del agua del antiguo humedal del Saladar.
En cualquier caso, después de cinco días de bombear agua día y noche, en el Arenal de Xàbia la única calle que sigue convertida en un lago es la de Tamarits. La avenida de la Llibertat estaba ya ayer totalmente seca, aunque los vecinos y comerciantes con los que habló este diario indicaron que seguro que se vuelve a inundar en cuanto llueva otra vez con cierta intensidad.
Además, los obreros de la urbanización que levanta Ecisa en el Arenal, y que los comerciantes y vecinos señalan como causante de la inundación, volvieron ayer al tajo. Las bombas de la promotora siguen evacuando agua, que sale a chorro por las tuberías de pluviales del canal de la Fontana.
Sin colectores Esta urbanización se está construyendo sin que antes se realizaran los colectores de pluviales. La obra de los pluviales, según fuentes municipales, estaba previsto que comenzara este mismo lunes, pero ahora la zona está inundada y antes que nada hay que achicar toda el agua que anega el Camí dels Tamarits.
Mientras tanto, los afectados por la riada (se desbordó el Gorgos) y las inundaciones en Xàbia continúan presentando sus reclamaciones en la oficina de damnificados abierta por el Ayuntamiento en el retén de la Policía Local en el Arenal. El alcalde, Eduardo Monfort, indicó ayer que de momento hay constancia de cuatro familias que han perdido los muebles y enseres de su vivienda habitual.
El alcalde también señaló que el ayuntamiento ha instado a los propietarios de la Casa Forta del Torroner, que es un BIC (Bien de Interés Cultural) a que la restauren. Esta construcción ha quedado bastante dañada por la riada, ya que está junto al cauce del río Gorgos y justo en el punto en el que el río se desbordó para buscar su cauce natural del canal de la Fontana. Si los propietarios no restauran este edificio protegido, que es de piedra tosca y todavía hoy mantiene ese imponente aspecto de las casas fuertes, lo hará el ayuntamiento pero luego le pasará la factura de las obras a los dueños.
E l agua que se achicaba todavía ayer en el Arenal de Xàbia dejaba su huella en la playa. Un espectacular
chorro caía sobre la arena y la arrastraba hasta el punto de dejar al descubierto la piedra tosca y la base de los lavapiés. Las bombas aún funcionaban a pleno rendimiento y evacuaban agua del Camí dels Tamarits, que continúa inundado, y del propio Saladar. En este último achique, el agua se evacuaba a la Sèquia de la Nòria, que es un canal de época romana excavado en la tosca. Desde este antiguo canal, el agua sale al litoral del Muntanyar y al mar.Quién iba a pensar que, tras siglos, la Sèquia de la Nòria de nuevo vería correr el agua. Si en época romana se utilizaba para introducir agua marina y fabricar la sal del garum (salazones), ahora este canal sirve para tratar de bajar algo el nivel del agua del antiguo humedal del Saladar.
En cualquier caso, después de cinco días de bombear agua día y noche, en el Arenal de Xàbia la única calle que sigue convertida en un lago es la de Tamarits. La avenida de la Llibertat estaba ya ayer totalmente seca, aunque los vecinos y comerciantes con los que habló este diario indicaron que seguro que se vuelve a inundar en cuanto llueva otra vez con cierta intensidad.
Además, los obreros de la urbanización que levanta Ecisa en el Arenal, y que los comerciantes y vecinos señalan como causante de la inundación, volvieron ayer al tajo. Las bombas de la promotora siguen evacuando agua, que sale a chorro por las tuberías de pluviales del canal de la Fontana.
Sin colectores Esta urbanización se está construyendo sin que antes se realizaran los colectores de pluviales. La obra de los pluviales, según fuentes municipales, estaba previsto que comenzara este mismo lunes, pero ahora la zona está inundada y antes que nada hay que achicar toda el agua que anega el Camí dels Tamarits.
Mientras tanto, los afectados por la riada (se desbordó el Gorgos) y las inundaciones en Xàbia continúan presentando sus reclamaciones en la oficina de damnificados abierta por el Ayuntamiento en el retén de la Policía Local en el Arenal. El alcalde, Eduardo Monfort, indicó ayer que de momento hay constancia de cuatro familias que han perdido los muebles y enseres de su vivienda habitual.
El alcalde también señaló que el ayuntamiento ha instado a los propietarios de la Casa Forta del Torroner, que es un BIC (Bien de Interés Cultural) a que la restauren. Esta construcción ha quedado bastante dañada por la riada, ya que está junto al cauce del río Gorgos y justo en el punto en el que el río se desbordó para buscar su cauce natural del canal de la Fontana. Si los propietarios no restauran este edificio protegido, que es de piedra tosca y todavía hoy mantiene ese imponente aspecto de las casas fuertes, lo hará el ayuntamiento pero luego le pasará la factura de las obras a los dueños.
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