El yacimiento de la Espina del Gallego, asediado por un merendero y antenas
http://www.eldiariomontanes.es/prensa/20070523/region/yacimiento-espina-gallego-asediado_20070523.html
La Guardia Civil investiga unas obras acometidas en una zona arqueológica declarada Bien de Interés Cultural
El complejo arqueológico de la Espina del Gallego, considerado el más importante campo de batalla de las Guerras Cántabras y declarado Bien de Interés Cultural, está sufriendo un particular 'asedio' por la ejecución de dos obras ilegales que se han acometido en estas últimas fechas. Eduardo Peralta, director del primer asedio romano de alta montaña localizado en el mundo, entre los valles de Toranzo e Iguña, denunció el pasado 7 de abril la instalación en el campamento de Cildá de un repetidor de señal 'WiFi' para conexión de Internet. Por si fuera poco, el autor de 'Los cántabros antes de Roma' volvió a presentar una nueva denuncia el pasado 15 de mayo ante el Seprona por la instalación en el castro de la Espina del Gallego de una mesa con bancos rodeada de un vallado de madera.
La Guardia Civil ha abierto una investigación para aclarar las circunstancias en las que la empresa Accesos Web Alternativas (AWA), radicada en Castellón y contratada por la Consejería de Economía, ejecutó obras para dar cobertura de Internet a las zonas rurales colocando un repetidor en el campamento romano de Cildá, que forma parte del conjunto arqueológico del yacimiento de la Espina del Gallego. La instalación consiste en una antena, un aerogenerador y un caseto, y se encuentra en los límites de las juntas vecinales de Alceda y Castillo Pedroso.
La Consejería de Cultura ya ha abierto un expediente informativo por posible infracción de la Ley del Patrimonio y ha pedido explicaciones a la empresa y a las dos instituciones locales de las que dependen esos terrenos: el Ayuntamiento de Corvera de Toranzo y Junta Vecinal de Alceda. La colocación de ese repetidor de señal 'WiFi' (Internet inalámbrico) y de un generador eólico de energía dentro de la zona arqueológica del campamento romano de Cildá fue denunciada ante la Guardia Civil por el arqueólogo Eduardo Peralta. El mismo arqueólogo puso los hechos en conocimiento de la Consejería de Cultura, porque esa obra no puede realizarse sin su autorización.
La denuncia ha puesto en marcha dos investigaciones independientes: una a cargo del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona), por si los hechos fueran constitutivos de delito, y otra de la Consejería de Cultura, por posible infracción de la Ley del Patrimonio de Cantabria.
Merendero
En cuanto al merendero clandestino, la mesa se encuentra junto al sector norte del barracón militar romano y próxima a la muralla superior de la acrópolis del castro. En la subida desde el lugar denominado el Portillón hasta la Espina del Gallego hay otras mesas y señalizaciones de una ruta de senderismo cuyo destino es el castro. Estas instalaciones, que no cuentan con las preceptivas autorizaciones de la Consejería de Cultura y del Servicio de Montes de la Consejería de Ganadería, han sido colocadas por una empresa para un proyecto promovido con fondos europeos por la Agencia de Desarrollo Local y el Ayuntamiento de Anievas. Ya se investigan estos hechos.
La Guardia Civil investiga unas obras acometidas en una zona arqueológica declarada Bien de Interés Cultural
El complejo arqueológico de la Espina del Gallego, considerado el más importante campo de batalla de las Guerras Cántabras y declarado Bien de Interés Cultural, está sufriendo un particular 'asedio' por la ejecución de dos obras ilegales que se han acometido en estas últimas fechas. Eduardo Peralta, director del primer asedio romano de alta montaña localizado en el mundo, entre los valles de Toranzo e Iguña, denunció el pasado 7 de abril la instalación en el campamento de Cildá de un repetidor de señal 'WiFi' para conexión de Internet. Por si fuera poco, el autor de 'Los cántabros antes de Roma' volvió a presentar una nueva denuncia el pasado 15 de mayo ante el Seprona por la instalación en el castro de la Espina del Gallego de una mesa con bancos rodeada de un vallado de madera.
La Guardia Civil ha abierto una investigación para aclarar las circunstancias en las que la empresa Accesos Web Alternativas (AWA), radicada en Castellón y contratada por la Consejería de Economía, ejecutó obras para dar cobertura de Internet a las zonas rurales colocando un repetidor en el campamento romano de Cildá, que forma parte del conjunto arqueológico del yacimiento de la Espina del Gallego. La instalación consiste en una antena, un aerogenerador y un caseto, y se encuentra en los límites de las juntas vecinales de Alceda y Castillo Pedroso.
La Consejería de Cultura ya ha abierto un expediente informativo por posible infracción de la Ley del Patrimonio y ha pedido explicaciones a la empresa y a las dos instituciones locales de las que dependen esos terrenos: el Ayuntamiento de Corvera de Toranzo y Junta Vecinal de Alceda. La colocación de ese repetidor de señal 'WiFi' (Internet inalámbrico) y de un generador eólico de energía dentro de la zona arqueológica del campamento romano de Cildá fue denunciada ante la Guardia Civil por el arqueólogo Eduardo Peralta. El mismo arqueólogo puso los hechos en conocimiento de la Consejería de Cultura, porque esa obra no puede realizarse sin su autorización.
La denuncia ha puesto en marcha dos investigaciones independientes: una a cargo del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona), por si los hechos fueran constitutivos de delito, y otra de la Consejería de Cultura, por posible infracción de la Ley del Patrimonio de Cantabria.
Merendero
En cuanto al merendero clandestino, la mesa se encuentra junto al sector norte del barracón militar romano y próxima a la muralla superior de la acrópolis del castro. En la subida desde el lugar denominado el Portillón hasta la Espina del Gallego hay otras mesas y señalizaciones de una ruta de senderismo cuyo destino es el castro. Estas instalaciones, que no cuentan con las preceptivas autorizaciones de la Consejería de Cultura y del Servicio de Montes de la Consejería de Ganadería, han sido colocadas por una empresa para un proyecto promovido con fondos europeos por la Agencia de Desarrollo Local y el Ayuntamiento de Anievas. Ya se investigan estos hechos.
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