5 de abril de 2006

Medol - Tarragona

La Arqueol?gica advierte de los graves da?os que ocasionaría una cantera en el M?dol
 
 
Sostiene en un informe que 'no es aceptable' conceder la autorización administrativa para su explotación
Carles Gosálbez | cgosalbez@diaridetarragona.com

La Reial Societat Arqueol?gica Tarraconense (RSAT) afirma en un informe sobre la cantera romana de El M?dol que «no es aceptable la concesión de una autorización administrativa para la realización de una actividad extractiva de piedra» en una cantera localizada a 700 metros de distancia del monumento romano y que la empresa ?rids T?rraco tiene la intención de explotar. El informe fue solicitado por el Gobierno municipal y ayer la RSAT lo entregó. El Ayuntamiento también se dirigió con esta finalidad a SOS Monuments y a la Unesco.

El informe está firmado por el presidente de la entidad, Rafael Gabriel, y en el mismo se recuerda que la cantera del M?dol y el paraje natural donde está enclavada fue declarado monumento histórico-artístico de carácter nacional el a?o 1931, y en 2000 fue declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco. A?ade que este espacio «tiene un gran interés paisajístico y ecológico por sus bosques y su peculiaridad, que ha generado un micro clima singular».


En el escrito, la Arqueol?gica muestra su sorpresa por el hecho de que «no se haya realizado un detallado estudio de impacto que contemple un profundo análisis geológico de la zona».

La concesión o no de la pertinente licencia enfrenta a la Generalitat y el Ayuntamiento. El informe favorable elevado por el Departament de Medi Ambient encendió hace casi un a?o las luces de alarma. El Ayuntamiento asegura que no ha concedido ninguna licencia para la explotación de la cantera ni tiene intención de firmarla.

En el informe remitido ayer al Ayuntamiento, la Arqueol?gica opina que «debe contemplarse la protección del patrimonio cultural en una doble vertiente: la preservación del patrimonio propiamente dicho y que no se vea alterada su función social, que supone que todos los ciudadanos puedan disfrutar de su contemplación en condiciones óptimas».

Da?os colaterales

La entidad que preside Gabriel expresa en el informe su temor a que la explotación de una cantera pueda ocasionar da?os irreparables en el monumento romano que aportó 50.000 metros cúbicos de piedra para la construcción de los grandes edificios públicos de Tarraco. «El monumento se puede ver afectado por las vibraciones y explosiones inherentes a la actividad extractiva». Subraya que «de todos es sabido que la transmisión de las ondas expansivas dentro de la roca tiende a escapar por las fallas que presenta el macizo, y dentro de la cantera romana hay una falla que se manifiesta en la propia Agulla del M?dol».


La actividad de la cantera «podría afectar seriamente a la pervivencia de la Agulla del M?dol», el símbolo de la cantera romana y uno de los elementos que identifican a la ciudad de Tarragona, «y provocar desplazamientos en las paredes frontales que se podrían traducir en desprendimientos».

Según el informe, «el discurrir de los siglos ha producido una erosión en el frontal que ha adelgazado algunas secciones de roca, que prácticamente se aguantan por los líquenes que crecen adheridos a la piedra, por lo que cualquier vibración podría provocar su ruptura definitiva». La desaparición de la Agulla del M?dol «sería una pérdida irreparable y ocasionaría un perjuicio gravísimo que pondría en duda el civismo de nuestro pueblo y de las autoridades competentes».

Piedra para el Circo

La cantera del M?dol es el lugar más importante de época romana de extracción de piedra. De este lugar salieron los sillares utilizados en la construcción de edificios como el Circo y el Fórum de la Provincia.


La cavidad resultante de la actividad de los picapedreros mide cien metros de largo por cincuenta de ancho, y en la parte central destaca la presencia de la Agulla del M?dol, de diecisiete metros de altura, que indica el nivel original de la monta?a. Se calcula que durante los a?os en que estuvo activa el volumen de piedra que aportó la cantera equivale a 50.000 metros cúbicos.

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