Pontevedra documenta el paso de la vía romana XIX por Barro
http://www.lavozdegalicia.es/deza/2007/11/23/0003_6342178.htm
El proyecto Vías Atlánticas permitió descubrir por vez primera restos físicos de la ruta
El proyecto Vías Atlánticas, que entre otras entidades promueve la Diputación pontevedresa y que busca recuperar y divulgar los antiguos trazados de las vías romanas XIX y XX en Galicia, permitió descubrir por vez primera vestigios físicos de la calzada XIX en la provincia, concretamente en el lugar de Lombo da Maceira, en Barro.
Como explicó ayer el arqueólogo de la Diputación, Rafael Rodríguez, durante el simposio en el que se dieron a conocer los resultados del proyecto, en el citado lugar de Barro se realizó una de las tres intervenciones arqueológicas de que constó la iniciativa en la provincia pontevedresa, después de haber realizado una prospección para delimitar el trazado de la vía. En Lombo da Maceira se llevaron a cabo cinco sondeos, «de los que tres fueron positivos». «Los trabajos -señala Rodríguez- permitieron establecer un trazado de la vía XIX en base a la arqueología, la toponimia y la topografía, además de comprobar que, a lo largo de la provincia, aún existen restos e indicios del paso de los romanos por estas tierras».
«Es el primer vestigio viario en la provincia y es importante para documentarla -explicó Rafael Rodríguez-. ¿Suficiente? Nunca es suficiente. Aparte hay que tener en cuenta que las vías romanas son como las carreteras de ahora, hoy pasan por aquí y mañana por otro lado». Las otras intervenciones permitieron descubrir otro miliario de Salcedo, en Pontevedra, que se encontraba fuera de lugar, y documentar también el miliario de Santiaguiño de Antas (Mos). Este sí se encuentra in situ y se acondicionará su entorno como parte de la recuperación de esta ruta.
Señalización
El proyecto está ahora en la fase de promoción y divulgación y, según explicó su coordinador, Antonio Torrón, probablemente la señalización de la vía XIX en la provincia esté completada a finales de este año. Se están instalando cuatro tipos de señales (de indicación de dirección, mesas con información de la vía, y señales para las zonas urbanas y rurales que documentan las distintas mansiones). Asimismo, la Diputación ha elaborado una guía para facilitar la realización de una ruta de senderismo por los aproximadamente cien kilómetros que tiene la ruta en Pontevedra, distribuidos en cuatro tramos.
24 de noviembre de 2007
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Creo que no hay mucha seriedad en estos temas, o quizás, pocos conocimientos en estos de las vías romanas. Sr.Rodriguez, dentyro de unos añitos podrá decir algunas cosas más serias y con más conoicimiento. Al día de hoy le falto un poco.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con lo que se comenta.
ResponderEliminarCon todo respecto el Sr. Rodriguez creo le faltan algunos conocimientos sobre los caminos romanos. He visto ese tramo de Barro y la verdad....de romano...poco.
Un descalabro general ya que son muchos los prfesionales que intervinieron.
Perdonen que discrepe en algún punto con ustedes, aunque lo primero por supuesto es agradecerles los comentarios hacia mi persona, siempre es bueno que hablen de uno aunque sea para criticar.
ResponderEliminarUna vez dicho esto, me gustaría comentar un par de cosas:
Primero, el proyecto referenciado ha sido ejecutado con absoluta seriedad, contando con un comité científico formado por profesionales de reconocido prestigio, además de con todas las autorizaciones sectoriales correspondientes.
Segundo, es cierto que me queda mucho por aprender, no sólo de vías romanas, "nadie nace aprendido" como dicen los mayores y menos en en lo que arqueología se refiere, por lo que acepto el comentario sin ningún tipo de rubor, aún así, en el caso de Barro, me gustaría que me dijeran ¿cómo pueden opinar tan alegremente?, sino visitaron los sondeos que allí realizamos en su momento para poder explicarles "in situ" los argumentos que me llevaron y llevan a defender la existencia de restos de una infraestructura viaria romana en la zona.
Por último, sólo quería agradecerles nuevamente que me hayan concedido un minuto de su tiempo con sus comentarios e invitarlos a visitar, siempre que quieran, próximas intervenciones que pueda dirigir (puesto que opiniones y discrepancias sobre el terreno siempre son productivas), pero eso sí sin caretas ni anónimos que es feo criticar de manera anónima, quizás no "feo" pero sí COBARDE.
Atentamente, Rafael Rodríguez