El futuro de la arqueología de Dénia
http://www.levante-emv.com/secciones/noticia.jsp?pRef=3651_17_341879__Alacant-futuro-arqueologia-Denia
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El programa de arqueología desarrollado las dos 
últimas décadas permite crear ya un itineario museográfico que muestre el valor de los yacimientos y reconstruya la ciudad hace casi 1.000 años
M. J. Mascarell, Dénia Dénia ha desarrollado en los últimos 20 años un programa de arqueología urbana convirtiéndose en una de las ciudades valencianas que ha logrado desde hace más tiempo un control exhaustivo de su patrimonio. La financiación de la arqueología urbana de acuerdo a la ley de patrimonio es trabajo de los promotores de las obras pero, además, Dénia dispone de un servicio municipal que se encarga de supervisar y ejercer un control total sobre las intervenciones arqueológicas que se llevan a cabo en la ciudad. Este hecho provoca que el Ayuntamiento de Dénia cuente con un importante banco de datos que permite ya aproximar un «mapa» de la ciudad romana o árabe.
Las excavaciones que se están llevando a cabo ahora en Dénia arrojan importantes novedades sobre la historia de la ciudad. En estos momentos, hay dos excavaciones urbanas que ofrecen datos novedosos. Por una parte, la existente en la avenida de Alcoi, que ha sacado a la luz un barrio periférico de la segunda mitad del siglo XI, con calles y casas. Y, en segundo lugar, los trabajos arqueológicos que se ejecutan ahora en la calle Marsal Caballero, junto a Patricio Ferrándiz, han revelado una tumba romana aislada en una zona donde nunca se habría pensado que existía. La tumba se ha hallado en la gola del Saladar, prácticamente en dominio marítimo-terrestre y data del siglo I después de Cristo.
La arqueología urbana se estudia y queda en la memoria científica, que está en manos de la administración, pero la asignatura pendiente es que algunos de los hallazgos trasciendan. Hace 20 años, un visitante de Dénia preguntaba sobre el pasado islámico y descubría tan sólo murallas y las torres de entrada al castillo. En la actualidad, a lo largo de 20 años de gestión de arqueología urbana, ya existe en Dénia una serie de puntos claves que disfrutan de una protección y que ya son propiedad municipal o bien el ayuntamiento tiene una concesión de uso. Por eso, el jefe del servicio de arqueología de Dénia, Josep Antoni Gisbert, opina que la ciudad necesita llevar a cabo ahora una política patrimonial que pasa por poner en valor los vestigios más relevantes de la arqueología árabe.
Los puntos susceptibles de convertirse en un itinerario para el disfrute de los ciudadanos son varios. Por un parte, el sótano del colegio Maristas, donde existen restos de un «funduq» del siglo XI. Asimismo, parte del circuito de la muralla del Fortí y su prolongación en el paseo del Saladar donde la futura urbanización de la calle dejará al descubierto y visible una parte de la muralla del «raval» islámico del siglo XI. En la actualidad, se está excavando el lienzo occidental de la muralla en el que se ha descubierto una torre circular y una barbacana. Este sistema defensivo, que data de los siglos XI y XII, será, de acuerdo al planeamiento urbanístico, una avenida con un paseo peatonal por donde se podrá recorrer la muralla por el interior y también por el exterior.
Además, existe una parcela de 875 m 2 en la avenida Joan Fuster en la que el visitante podrá disfrutar del urbanismo pseudortogonal del Fortí, así como de la tipología de viviendas del siglo XII, de la Dénia Almohade.
Por otra parte, hay algunos edificios que conservan en sus sótanos testimonios «in situ» de segmentos de muralla o fortificaciones de época andalusí.
Estos puntos de interés arqueológico pueden ofrecer, a medio plazo, un mapa de la ciudad con un itinerario en el que se podrá reconocer cómo era la ciudad de Dénia hace ahora casi 1.000 años. Este tipo de proyecto «tendrá una importante repercusión y aportará toda una nueva red interrelacionada que mantendría un diálogo con los museos de Dénia y el castillo» , apunta el jefe del servicio de arqueología, Josep Antoni Gisbert. Para ello, se debería incidir en el planeamiento, rehabilitar los restos y realizar una serie de intervenciones museográficas para señalizar el patrimonio y promocionarlo.
Un itinerario que deslumbraría con su esplendor en 2012, cuando se cumple un milenio de la desmembración del Califato de Córdoba y el rey Muhajid funda el reinado de Dénia. Un buen momento para poder contemplar los frutos en los avances de arqueología urbana realizados en Dénia.
últimas décadas permite crear ya un itineario museográfico que muestre el valor de los yacimientos y reconstruya la ciudad hace casi 1.000 añosM. J. Mascarell, Dénia Dénia ha desarrollado en los últimos 20 años un programa de arqueología urbana convirtiéndose en una de las ciudades valencianas que ha logrado desde hace más tiempo un control exhaustivo de su patrimonio. La financiación de la arqueología urbana de acuerdo a la ley de patrimonio es trabajo de los promotores de las obras pero, además, Dénia dispone de un servicio municipal que se encarga de supervisar y ejercer un control total sobre las intervenciones arqueológicas que se llevan a cabo en la ciudad. Este hecho provoca que el Ayuntamiento de Dénia cuente con un importante banco de datos que permite ya aproximar un «mapa» de la ciudad romana o árabe.
Las excavaciones que se están llevando a cabo ahora en Dénia arrojan importantes novedades sobre la historia de la ciudad. En estos momentos, hay dos excavaciones urbanas que ofrecen datos novedosos. Por una parte, la existente en la avenida de Alcoi, que ha sacado a la luz un barrio periférico de la segunda mitad del siglo XI, con calles y casas. Y, en segundo lugar, los trabajos arqueológicos que se ejecutan ahora en la calle Marsal Caballero, junto a Patricio Ferrándiz, han revelado una tumba romana aislada en una zona donde nunca se habría pensado que existía. La tumba se ha hallado en la gola del Saladar, prácticamente en dominio marítimo-terrestre y data del siglo I después de Cristo.
La arqueología urbana se estudia y queda en la memoria científica, que está en manos de la administración, pero la asignatura pendiente es que algunos de los hallazgos trasciendan. Hace 20 años, un visitante de Dénia preguntaba sobre el pasado islámico y descubría tan sólo murallas y las torres de entrada al castillo. En la actualidad, a lo largo de 20 años de gestión de arqueología urbana, ya existe en Dénia una serie de puntos claves que disfrutan de una protección y que ya son propiedad municipal o bien el ayuntamiento tiene una concesión de uso. Por eso, el jefe del servicio de arqueología de Dénia, Josep Antoni Gisbert, opina que la ciudad necesita llevar a cabo ahora una política patrimonial que pasa por poner en valor los vestigios más relevantes de la arqueología árabe.
Los puntos susceptibles de convertirse en un itinerario para el disfrute de los ciudadanos son varios. Por un parte, el sótano del colegio Maristas, donde existen restos de un «funduq» del siglo XI. Asimismo, parte del circuito de la muralla del Fortí y su prolongación en el paseo del Saladar donde la futura urbanización de la calle dejará al descubierto y visible una parte de la muralla del «raval» islámico del siglo XI. En la actualidad, se está excavando el lienzo occidental de la muralla en el que se ha descubierto una torre circular y una barbacana. Este sistema defensivo, que data de los siglos XI y XII, será, de acuerdo al planeamiento urbanístico, una avenida con un paseo peatonal por donde se podrá recorrer la muralla por el interior y también por el exterior.
Además, existe una parcela de 875 m 2 en la avenida Joan Fuster en la que el visitante podrá disfrutar del urbanismo pseudortogonal del Fortí, así como de la tipología de viviendas del siglo XII, de la Dénia Almohade.
Por otra parte, hay algunos edificios que conservan en sus sótanos testimonios «in situ» de segmentos de muralla o fortificaciones de época andalusí.
Estos puntos de interés arqueológico pueden ofrecer, a medio plazo, un mapa de la ciudad con un itinerario en el que se podrá reconocer cómo era la ciudad de Dénia hace ahora casi 1.000 años. Este tipo de proyecto «tendrá una importante repercusión y aportará toda una nueva red interrelacionada que mantendría un diálogo con los museos de Dénia y el castillo» , apunta el jefe del servicio de arqueología, Josep Antoni Gisbert. Para ello, se debería incidir en el planeamiento, rehabilitar los restos y realizar una serie de intervenciones museográficas para señalizar el patrimonio y promocionarlo.
Un itinerario que deslumbraría con su esplendor en 2012, cuando se cumple un milenio de la desmembración del Califato de Córdoba y el rey Muhajid funda el reinado de Dénia. Un buen momento para poder contemplar los frutos en los avances de arqueología urbana realizados en Dénia.
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