20 de mayo de 2007

Valencia

“Valencia ya lucía con los romanos”
Los primeros visitantes de la Almoina destacan su “majestuosidad” y la facilidad de comprensión de las ruinas gracias a los vídeos

http://www.lasprovincias.es/valencia/prensa/20070520/valencia/valencia-lucia-romanos_20070520.html

Acudir a la plaza de la Almoina es disfrutar de la historia de Valencia. Con la apertura del museo arqueológico, que empezó a recibir visitas guiadas el viernes, se pone el punto y final a una excavación iniciada en 1985 y que ha permitido sacar a la luz el germen fundacional de la capital del Turia.

El museo está abierto los fines de semana y sólo se puede disfrutar con visitas guiadas que se organizan cada media hora (hoy funcionará de 10 a 20 horas).

Los primeros visitantes han coincidido en destacar la belleza de las ruinas, que adquieren mayor valor cuando se contextualizan con la ayuda de los medios audiovisuales y con las explicaciones de las guías, todas ellas expertas licenciadas en Bellas Artes o Historia del Arte.

“Este trabajo demuestra que Valencia ya lucía hace 22 siglos con los romanos”, señala Carmen, una vecina de Manises aficionada a la historia de Roma. “Los sillares me transmiten majestuosidad. Es una grata experiencia”, señala.

Las visitas tienen una duración aproximada de media hora y están acompañadas de vídeos que ayudan a la comprensión. Se pasea por las termas del siglo II, de las más antiguas que se conservan, para seguir por la Roma Imperial y sus dos principales avenidas (que no se pueden pisar pero se ve perfectamente por donde discurrían), para concluir con restos visigodos y árabes.

También hay críticas. “Es mucha información para tan poco tiempo” señala Francisco Sánchez, vecino de Valencia. “Podrían ofrecer cascos de traducción para personas extranjeras”, sugiere José Emilio Farinós.

“Se ha potenciado mucho su valor como ruina. Está todo muy cuidado. Yo creo que el vídeo es complementario, se explican solas”, apunta Javier, otro de los primeros visitantes de la Almoina.

La acogida está siendo muy positiva, teniendo en cuenta que se ha comenzado con visitas guiadas y grupos limitados, como explican las guías del museo. De hecho, durante el primer día cerca de 130 personas acudieron al complejo. Ayer, hasta las 14 horas, ya se habían recibido 150 visitas.

“Me ha encantado. Tienes que organizarte las ideas para ver las épocas. Me ha llamado la atención la falta de ornamentación, pero es algo digno de ser visitado. Mañana (por hoy), volveré con mi hijo”, apunta Ana Morro, vecina de Madrid.

“Está todo muy bien explicado, tanto por las chicas como por los vídeos. Me ha llamado especialmente la atención el ábside del martirio de San Vicente. Las proyecciones están muy bien hechas”, señala Teresa Marcos, otra vecina de Valencia.

“Me llama mucho el tipo de construcciones que hacían para la época”, añade Joaquín Bravo, que concreta su afirmación destacando la preciosa piedra angular de un arco romano que se puede observar en el museo.

El principal pero es sin duda la falta de conservación de la lámina de agua de la plaza, que integra el museo con la Valencia actual y permite observar las ruinas desde arriba. Pisadas, tierra acumulada en los cristales y restos de papeles empañan las primeras vistas de la Valencia fundacional y primitiva.

El museo se extiende sobre lo que fue el edificio de la Almoina, construido en el siglo XIV. Se trata de un recinto de 2.500 metros cuadrados que conserva vestigios que van desde el siglo II A. C. al XIV.

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