Los restos romanos no afectan a las obras
La aparición de elementos vinculados al Fňrum de la Província en las viviendas de la calle Comte no retrasará el regreso a casa de los vecinos desalojados
http://www.diaridetarragona.com/dtgn/noticia.php?id=7009&sec=1
La presencia de restos de época romana, dispersos por el subsuelo de las casas de la calle Comte, no debe afectar a los trabajos de micropilotaje que se están llevando a término. Las catas arqueológicas encargadas por el Museu d'Histňria han puesto de manifiesto que en la zona de las casas más próxima a la Plaça del Pallol la tierra no está húmeda. En este espacio se encontraba, en época de Tŕrraco, el muro que separaba el pasillo porticado del Fňrum del suelo de la Plaça de Representació.
Maria Reis Fabregat, arqueóloga de la empresa Nemesis, quitó importancia a los restos de época romana que han aparecido en las catas, por tratarse, en su mayoría, de elementos que fueron utilizados para rellenar el terreno. «Es una actuación normal, que siempre se hace en la Part Alta cuando hay un movimiento de tierras», dijo.
En las catas ha aparecido un tramo de pavimento de época tardoromana, «que probablemente estaría dentro de la Plaça de Representació, la base de una pilastra de mármol y dos sillares.
La intervención arqueológica se localiza en el interior de los edificios que se corresponden con los números 4 y 6, y las catas están pegadas al muro situado en el límite de la Plaça del Pallol. De los restos que han aparecido hasta ahora se desprende que su presencia «no interferirá en los trabajos de micropilotaje».
Por otra parte, se ha podido observar que en esta zona de las casas -la más profunda si se tiene como referencia la calle Comte- «no hay humedad y la cimentación se encuentra en buen estado».
El regreso a casa
Pep Escoda es uno de los vecinos que opinan que la próxima semana no se podrá iniciar el regreso a sus casas de personas desalojadas. El fotógrafo de la calle Comte destacó, sin embargo, que «el ritmo de los trabajos -de micropilotaje y cimentación- es bueno».
El concejal de Urbanismo, Jordi Sendra, se reunió el lunes con los vecinos de la calle Comte, a petición de éstos. El encuentro transcurrió bajo «un clima muy cordial y sirvió para romper la pequeńa tensión que hubo con el Ayuntamiento en los primeros días de la crisis».
Escoda informó que Sendra «no se aventuró a dar fechas» sobre el posible regreso de los vecinos afectados por el movimiento de las casas, y agradeció «el puntual seguimiento de los trabajos por parte del concejal».
Ayer, por primera vez desde que se iniciaron las obras, acudió a su estudio fotográfico. «Ver así un local que inauguré en septiembre como galería de arte causa una extrańa sensación y da un poco de pena, pero lo importante es que todo acabe bien».
La aparición de elementos vinculados al Fňrum de la Província en las viviendas de la calle Comte no retrasará el regreso a casa de los vecinos desalojados
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La presencia de restos de época romana, dispersos por el subsuelo de las casas de la calle Comte, no debe afectar a los trabajos de micropilotaje que se están llevando a término. Las catas arqueológicas encargadas por el Museu d'Histňria han puesto de manifiesto que en la zona de las casas más próxima a la Plaça del Pallol la tierra no está húmeda. En este espacio se encontraba, en época de Tŕrraco, el muro que separaba el pasillo porticado del Fňrum del suelo de la Plaça de Representació.
Maria Reis Fabregat, arqueóloga de la empresa Nemesis, quitó importancia a los restos de época romana que han aparecido en las catas, por tratarse, en su mayoría, de elementos que fueron utilizados para rellenar el terreno. «Es una actuación normal, que siempre se hace en la Part Alta cuando hay un movimiento de tierras», dijo.
En las catas ha aparecido un tramo de pavimento de época tardoromana, «que probablemente estaría dentro de la Plaça de Representació, la base de una pilastra de mármol y dos sillares.
La intervención arqueológica se localiza en el interior de los edificios que se corresponden con los números 4 y 6, y las catas están pegadas al muro situado en el límite de la Plaça del Pallol. De los restos que han aparecido hasta ahora se desprende que su presencia «no interferirá en los trabajos de micropilotaje».
Por otra parte, se ha podido observar que en esta zona de las casas -la más profunda si se tiene como referencia la calle Comte- «no hay humedad y la cimentación se encuentra en buen estado».
El regreso a casa
Pep Escoda es uno de los vecinos que opinan que la próxima semana no se podrá iniciar el regreso a sus casas de personas desalojadas. El fotógrafo de la calle Comte destacó, sin embargo, que «el ritmo de los trabajos -de micropilotaje y cimentación- es bueno».
El concejal de Urbanismo, Jordi Sendra, se reunió el lunes con los vecinos de la calle Comte, a petición de éstos. El encuentro transcurrió bajo «un clima muy cordial y sirvió para romper la pequeńa tensión que hubo con el Ayuntamiento en los primeros días de la crisis».
Escoda informó que Sendra «no se aventuró a dar fechas» sobre el posible regreso de los vecinos afectados por el movimiento de las casas, y agradeció «el puntual seguimiento de los trabajos por parte del concejal».
Ayer, por primera vez desde que se iniciaron las obras, acudió a su estudio fotográfico. «Ver así un local que inauguré en septiembre como galería de arte causa una extrańa sensación y da un poco de pena, pero lo importante es que todo acabe bien».
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