Europa avala que León acoja un centro de arqueología romana
J. MŞ RODRIGUEZ LEON.? El Consejo de Europa recomienda que la capital leonesa acoja un «centro de estudios de arqueología militar romana, dada su singularidad» por los restos que afloran en el subsuelo y en cuanto que fue uno de los principales enclaves legionarios del Noroeste de Hispania.
Esta es una de las principales conclusiones del trabajo realizado dentro del programa de Cooperación y Asistencia Técnica incardinado en la Dirección General de Educación, Cultura y Patrimonio, Juventud y Deporte. El informe había sido solicitado meses atrás a varios representantes espańoles en dicha institución europea por la concejala de Patrimonio, Evelia Fernández (PSOE).
El trabajo viene a coincidir así con las exposiciones del congreso peninsular de arqueología militar romana, que se celebró el mes pasado en León, y en donde se puso de manifiesto la importancia de la huella militar de Roma en la ciudad, pese a que algunos restos ?como los 'principia' de San Pelayo? permanecen tapados por el desacuerdo entre el Ayuntamiento y la Junta. Dichos restos fueron considerados como «únicos» en Espańa por su singularidad. La ciudad mantiene ocultas las termas y la promesa de la Junta de poner en valor el solar romano de Santa Marina no se ha materializado.
El informe que acaba de recibir la concejala de Patrimonio incide en la necesaria conciliación entre la ciudad vieja y la moderna, subrayando la importancia que juega la restauración y la conservación en dicho concierto.
Los expertos creen fundamental la puesta en marcha de una estrategia que conjugue monumentalidad y multifuncionalidad. La rehabilitación de inmuebles que va a propiciar el ARI será clave, aunque se aboga por la revisión del Plan Especial de Protección, Conservación y Mejora de la Ciudad Antigua de manera que se afronten «los nuevos objetivos de la rehabilitación urbana».
El texto, que advierte un exceso de circulación en el casco histórico, reivindica un giro en la integración arquitectónica al entender que León muestra tendencia a una preocupación excesiva por las fachadas y tanto por el contenido de los inmuebles. En este rediseńo se tendrán que valorar las tres grandes funciones del casco viejo: residencial, servicios y terciario, y residencial, así como incidir en la puesta en valor de los monumentos emblemáticos.
Esta es una de las principales conclusiones del trabajo realizado dentro del programa de Cooperación y Asistencia Técnica incardinado en la Dirección General de Educación, Cultura y Patrimonio, Juventud y Deporte. El informe había sido solicitado meses atrás a varios representantes espańoles en dicha institución europea por la concejala de Patrimonio, Evelia Fernández (PSOE).
El trabajo viene a coincidir así con las exposiciones del congreso peninsular de arqueología militar romana, que se celebró el mes pasado en León, y en donde se puso de manifiesto la importancia de la huella militar de Roma en la ciudad, pese a que algunos restos ?como los 'principia' de San Pelayo? permanecen tapados por el desacuerdo entre el Ayuntamiento y la Junta. Dichos restos fueron considerados como «únicos» en Espańa por su singularidad. La ciudad mantiene ocultas las termas y la promesa de la Junta de poner en valor el solar romano de Santa Marina no se ha materializado.
El informe que acaba de recibir la concejala de Patrimonio incide en la necesaria conciliación entre la ciudad vieja y la moderna, subrayando la importancia que juega la restauración y la conservación en dicho concierto.
Los expertos creen fundamental la puesta en marcha de una estrategia que conjugue monumentalidad y multifuncionalidad. La rehabilitación de inmuebles que va a propiciar el ARI será clave, aunque se aboga por la revisión del Plan Especial de Protección, Conservación y Mejora de la Ciudad Antigua de manera que se afronten «los nuevos objetivos de la rehabilitación urbana».
El texto, que advierte un exceso de circulación en el casco histórico, reivindica un giro en la integración arquitectónica al entender que León muestra tendencia a una preocupación excesiva por las fachadas y tanto por el contenido de los inmuebles. En este rediseńo se tendrán que valorar las tres grandes funciones del casco viejo: residencial, servicios y terciario, y residencial, así como incidir en la puesta en valor de los monumentos emblemáticos.
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