La autopista destapa un poblado minero romano en la finca Petén
Las minas de Mazarrón no son las únicas de la Región que cuentan con protección de Cultura. También gozan de la misma categoría las explotaciones abandonadas de Cartagena y La Unión. Pero existe una diferencia clave. El promontorio volcánico de San Cristóbal y Los Perules reúne en apenas un kilómetro cuadrado «toda la historia de la minería, desde la época romana, a los alumbres del siglo XV y el boom industrial de finales del XIX», según indica Ángel Iniesta, jefe del servicio de Patrimonio Histórico de la Comunidad Autónoma.
Es más, no dejan de aparecer testimonios de la importancia de la minería en Mazarrón. Los trabajos de construcción de la autopista de Cartagena-Vera, a escasos metros del cerro minero, han descubierto en la llamada finca Petén un núcleo de población de la época romana relacionado con esta actividad industrial. De momento, un arqueólogo sigue documentando la zona, a la espera de ver qué se decide conservar.
Iniesta cree que el yacimiento de la finca Petén podría incluirse en el futuro parque temático. Pero hay más novedades. El jefe de Patrimonio anuncia que la Dirección General de Cultura prepara ya el expediente para declarar bien de interés los otros dos cotos mineros de Mazarrón: las Pedreras Viejas (junto al antiguo vertedero) y el Coto Fortuna, a siete kilómetros al oeste del pueblo.
Iniesta confía en que el parque temático de las minas puede ser una realidad «a medio plazo». Aún queda trabajo por delante. El siguiente paso será elaborar un plan director que recoja los usos compatibles, un catálogo de edificios y los recursos disponibles con el fin de ir recuperando elementos y sentar las bases del futuro parque cultural y turístico. Este experto sostiene que una vez redactado un estudio de las zonas que son seguras ya se podrían abrir algunas rutas para permitir las visitas turísticas.
Pero ?qué puede verse en este cerro volcánico? Si se decide a visitarlo, piense que es como un queso gruyere gigante, lleno de pozos y galerías que pueden hundirse. Así que no corra riesgos y busque un acompa?ante que conozca el terreno. Una vez en el lugar descubrirá un paisaje de mil colores, misteriosos estanques, imponentes castilletes, pozos que parecen conducir al infierno, cuevas en las que podrá hacerse una idea de cómo malvivían los mineros, explotaciones de la época romana... Un paseo por 2.000 a?os de historia. La esencia de un pueblo que vio cómo la mina dejó más heridas que riqueza.
Es más, no dejan de aparecer testimonios de la importancia de la minería en Mazarrón. Los trabajos de construcción de la autopista de Cartagena-Vera, a escasos metros del cerro minero, han descubierto en la llamada finca Petén un núcleo de población de la época romana relacionado con esta actividad industrial. De momento, un arqueólogo sigue documentando la zona, a la espera de ver qué se decide conservar.
Iniesta cree que el yacimiento de la finca Petén podría incluirse en el futuro parque temático. Pero hay más novedades. El jefe de Patrimonio anuncia que la Dirección General de Cultura prepara ya el expediente para declarar bien de interés los otros dos cotos mineros de Mazarrón: las Pedreras Viejas (junto al antiguo vertedero) y el Coto Fortuna, a siete kilómetros al oeste del pueblo.
Iniesta confía en que el parque temático de las minas puede ser una realidad «a medio plazo». Aún queda trabajo por delante. El siguiente paso será elaborar un plan director que recoja los usos compatibles, un catálogo de edificios y los recursos disponibles con el fin de ir recuperando elementos y sentar las bases del futuro parque cultural y turístico. Este experto sostiene que una vez redactado un estudio de las zonas que son seguras ya se podrían abrir algunas rutas para permitir las visitas turísticas.
Pero ?qué puede verse en este cerro volcánico? Si se decide a visitarlo, piense que es como un queso gruyere gigante, lleno de pozos y galerías que pueden hundirse. Así que no corra riesgos y busque un acompa?ante que conozca el terreno. Una vez en el lugar descubrirá un paisaje de mil colores, misteriosos estanques, imponentes castilletes, pozos que parecen conducir al infierno, cuevas en las que podrá hacerse una idea de cómo malvivían los mineros, explotaciones de la época romana... Un paseo por 2.000 a?os de historia. La esencia de un pueblo que vio cómo la mina dejó más heridas que riqueza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario