Cornalvo volverá a ser Parque Natural El Parque de Cornalvo constituye uno de los enclaves de bosque y matorral mediterráneo más importantes de la península ibérica.
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Cornalvo, situado a 8 kilómetros de Mérida, fue declarado Parque Natural por el Decreto 27/1993 de 24 de febrero, abarca una extensión de 10.740 hectáreas que se reparten entre los términos municipales de Aljucén, Mérida, Guare?a, Mirandilla, San Pedro de Mérida, pertenecientes a la provincia de Badajoz.
El área tuvo la consideración de Parque Natural, que fue anulada a raíz de una sentencia del Tribunal Supremo de 6 de mayo de 2003, quedando por tanto sin efecto las medidas de protección que aseguraban la conservación del espacio. La sentencia se fundamentaba en que el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de Cornalvo no había sido aprobado en el plazo establecido conforme a la legislación vigente.
Con carácter excepcional, se promueve de nuevo la declaración de Cornalvo como Parque Natural, sin la preceptiva aprobación del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales, ante "el evidente riesgo de puesta en peligro de los valores naturales y culturales" en la zona.
La Mesa de la Asamblea de Extremadura ha admitido a trámite el Proyecto de Ley para volver a declarar el área de Cornalvo como Parque Natural y, el plazo para la
presentación de enmiendas de los grupos al citado proyecto legislativo finalizará el próximo 11 de octubre.
El Parque de Cornalvo constituye uno de los enclaves de bosque y matorral mediterráneo más importantes de la península ibérica. Junto a especies endémicas, como es el Jarabugo, cohabitan otras especies especialmente protegidas como la cigüe?a negra, la grulla común o la nutria. Además de las especies faunísticas se?aladas, existe una amplia y destacada variedad florística, la abundancia de alcornoques y de encinas hacen de Cornalvo un estado natural de incalculable valor ecológico. Todos estos factores naturales a su vez alternan con un paisaje peculiar y con vestigios histórico-artísticos, como es la singular presa romana de Cornalvo.
Por qué Cornalvo
La Presa romana de Cornalvo representa uno de las características más representativa del Parque. Pese a su antigüedad, este embalse sigue abasteciendo de agua a varios municipios. ?Cuerno blanco? (?Cornus Albus?) fue el nombre que le dieron los romanos a la presa debido a la forma de cuerno del embalse visto desde arriba y las blancas aguas del río Albarregas, nacidas bajo la presa.
La función del embalse era la de abastecer de agua a la antigua Emérita Augusta, la actual Mérida, a través de una galería de 25 kilómetros que transportaba el agua. Por su importancia y su excelente estado de conservación, la presa romana de Cornalvo fue declarada Monumento Nacional en 1912.
Otros de los restos romanos que se han encontrado en la zona son las conducciones subterráneas de agua, las fuentes, las villas, las calzadas o incluso los puentes o los puestos de vigilancia. Una de las diferencias de Cornalvo respecto a otros embalses es que se llena desviando el agua desde el embalse de las Muelas, un canal romano que se conserva en la actualidad, y no recibe el agua directa de ningún río.
El principal recurso económico de las fincas existentes en Cornalvo es la ganadería (ovino, vacuno, porcino y caprino) frente a una agricultura casi inexistente sino fuera por algunos cultivos de cereales de secano. La abundancia de alcornoques en la zona ha derivado en una de las grandes riquezas del parque, el corcho que acompa?a a otro tipo de
aprovechamientos como la apicultura (miel y polen), recogida de frutos silvestres o la obtención de le?a y carbón vegetal.
Peculiaridades del paisaje
El Parque de Cornalvo presenta un paisaje muy uniforme compuesto por suaves ondulaciones del terreno divididas en las dos formaciones monta?osas que ostenta: Sierra Bermeja y Sierra del Moro. El principal curso fluvial del parque es el río Aljucén que lo atraviesa de Norte a Oeste.
En el arroyo de las Muelas, se encuentra el paraje conocido con el nombre de ?El Rugidero? o ?Berrocal del Rugidero?, uno de los lugares más visitados por el público. Este nombre le viene dado por el sonido atronador que provoca el agua en épocas de lluvias en su paso por las honduras de las rocas o las cascadas.
Las dehesas de encinas y de alcornoque es la vegetación predominante en Cornalvo, como consecuencia de esto, han nacido parajes como ?Borbollón? de alcornoques o ?Las Raposeras? de encinas. No obstante, el tratamiento de este paisaje no es fruto de la casualidad ya que desde la antiguada hasta hoy, los propietarios de las fincas establecidas en este lugar han cuidado de mantener su autenticidad original.
De la dehesa a la garza real
La vegetación del Parque de Cornalvo es la típica mediterránea, como corresponde a su situación bioclimática, predominando las dehesas de encinas y de alcornoques. Las dehesas son el resultado de la transformación por el hombre de los bosques originales para su uso agrícola y ganadero.
Los bosques más o menos originales de encina y alcornoque se encuentran reducidos a determinados enclaves en las dos sierras principales, ya que la mayor parte de ellos fueron transformados en la antigüedad en dehesas, especialmente en los terrenos llanos y con mejores sueldos, más aptos para la agricultura y la ganadería.
La presencia de encinas y alcornoques dentro del mismo territorio, propicia la existencia de dehesas mixtas de ambas especies, siendo características de determinadas zonas del Parque y contribuyen a incrementar la diversidad biológica, albergando una variada fauna y flora.
Asociadas a las riberas de los arroyos sometidos a un escaso estiaje se han desarrollado bosques de galerías formados por: fresnos, chopos, olmos y numerosas especies de Sauces. Mientras, en los arroyos que presentan un marcado estiaje, se han desarrollado Tapujares y Adelfares. Tampoco Cornalvo se ha salvado de la repoblación de pinos y eucaliptos.
En el Parque de Cornalvo se han inventariado un total de 249 especies de vertebrados, dando lugar a un elevado grado de conservación de sus ecosistemas. Existen 175 especies de aves, de las que al menos, 75 se estima que puedan anidar. Junto a estos datos, se ha constatado la presencia de 31 especies de mamíferos, 13 anfibios, 16 reptiles y 14 peces.
La cigüe?a negra es una de las aves que más destaca ya que su especie está catalogada en peligro de extinción, su presencia es habitual en las orillas de las charcas o embalses. El buitre negro y el leonado, el águila calzada y culebrero, el milano negro y el real o el búho real son algunas de las poblaciones rapaces que habitan en este singular espacio. A las
mencionadas anteriormente, se suman las aves acuáticas como la garza real o aves tan particulares como el halcón avejero que se alimenta de nidos de avispas y abejas.
El conejo, la liebre, el gato montés, el jabalí, el tejón y la nutria se enmarcan entre los mamíferos que habitan en el parque. La biodiversidad de Cornalvo permite que existan especies en peligro de extinción como el especie de pez jarabugo, descubierta en 1866 en el río Aljucén o, en el caso contrario, se encuentre el sapo partero ibérico, siendo Cornalvo uno de los enclaves poblacionales de esta especie en la península ibérica.
Rutas para el senderismo
El Parque de Cornalvo goza de seis rutas para descubrir los misteriosos paisajes que configuran el relieve de este enclave, estos caminos llevan como nombre: cordel del cerro del gato, ruta de las dehesas, cordel del puerto, cordel de Santa María de Araya, embalse de Cornalvo y Berrocal del Rugidero.
Ruta Cordel del Cerro Gato. Con una duración de dos horas, es el primer camino a la derecha del río Aljucén. En su paseo, se puede observar las zonas más arboladas del parque tanto de encinas como de alcornoques. A los dos kilómetros se puede enlazar con la ruta de las dehesas una vez atravesado el puente romano de la vía de la Plata.
Ruta de las Dehesas. Tiene una duración de cuatro horas a pie y parte desde la margen izquierda del puente del río Aljucén. Esta ruta se considera la principal dentro del parque y la de mayor longitud (18 kilómetros), por lo que se recomienda realizarla en bicicleta. En su
recorrido se encuentra el embalse de Las Muelas donde se puede observar la avifauna vinculada a los medios acuáticos. Cruza el territorio de extremo a extremo y permite enlazar con otras rutas como la del cordel del puerto.
Ruta Cordel del Puerto. A lo largo de dos horas caminando se puede atravesar el parque de sur a norte gracias a este recorrido que parte desde la Ermita de San Isidro, en el límite del parque y en término municipal de Mirandilla. Una vez pasado el puerto del Moro puede
contemplarse excelentes vistas panorámicas de las dehesas de Cornalvo.
Ruta Cordel de Santa María de Araya. Posee un trayecto de una hora a pie de duración, su recorrido comienza donde el arroyo Tamujoso cruza la carretera que discurre desde el embalse de Cornalvo al embalse de las Muelas. Esta ruta presenta como atractivo una de las fresnedas más espectaculares y mejor conservadas del parque.
Ruta Embalse de Cornalvo. En una hora y media se puede recorrer el perímetro del embalse de Cornalvo, siendo su principal interés la visita a la presa romana. El recorrido se compone de poblados encinares y alcornocales además de extensos jarales. Los sotos existentes aguas abajo son muy frecuentados por aves, siendo espectacular en primavera escuchar
los cantos de los ruise?ores, mirlos, currucas y zarceros.
Ruta del Berrocal del Rugidero. Se accede por la entrada desde la carretera de Cornalvo al embalse de Muelas. A lo largo del río Muelas, existen espectaculares formaciones graníticas que han sido modeladas por la erosión del agua en el transcurso del tiempo denominadas Marmitas Gigantes, siendo las más espectaculares las ubicadas en el paraje del Rugidero.M. ADR. COMPLVTENSISLEGATVS HISP.PROV.N.R.AEDILIS OP.COMPLVTVMVERBA VOLANT
8 de octubre de 2004
MERIDA
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